Barcelona le dio de comer y Neto solo da peores noticias a Joan Laporta

Es algo que parece no tener fin en el Barcelona. Todos los horrores que dejó Bartomeu luego de que termine su presidencia, las recibe Joan Laporta durante su mandato. Da la sensación de que cuando se tapa un agujero, otro vuelve a aparecer de la nada misma. Contratos altísimos a jugadores que no lo valen. Fichajes que ni los propios fanáticos blaugranas entienden como pudieron suceder. 

Por momentos parecía que el Barcelona estaba conformando un equipo de galácticos, como solía tener el Real Madrid. Todo esto tiene un precio a la larga. Los gastos para poder rearmar ese tridente que tantos éxitos brindó (la MSN), dejó la vara muy alta. La incorporación de Coutinho, fue como agarrar una montaña de dinero e incinerarla en ese mismo instante. 

Uno cree que por comprar un jugador que está en un buen momento, puede acostumbrarse rápido a un estilo de juego y poder hacer lo mismo en cualquier posición. Claramente el caso del mediocampista ofensivo brasileño no fue así. Mejores actuaciones tuvo Paulinho, quien llegó por un monto totalmente inferior y dejó una imágen mucho mejor por la baja expectativa que tenía la gente sobre él. 

Aquí tenemos otro caso de lo que fue Bartomeu como presidente del FC Barcelona. Claro está que no hizo todo mal durante su mandato pero en la recta final, lo único que supo hacer con el dinero que ingresó por la venta de Neymar fue despilfarrarlo. Compras desorbitantes que condujeron a la institución a tener deudas impagables. 

¿Qué le debe el Barcelona al Valencia?

Cuando se realizó el cambio de porteros entre ambos clubes (Cillissen y Neto) en 2019, acordaron que si el arquero brasileño no cumplía su contrato, debían resarcir al club Valenciano. Los culés lo negaron pero, según informó la Cadena SER, la situación llegó a tribunales y deberán pagarles 4 millones de euros al Valencia. Ojo, tendrían que haber sido 9 millones pero el guardameta rescindió su contrato con los catalanes para llegar libre al Bournmouth.